La parte más variable de una semilla son los tegumentos seminales, su estructura varía enormemente entre especies. En la foto se muestra una imagen de la semilla de un manzano. Superficialmente se encuentra la testa, la cual posee una gruesa cutícula que protege a la semilla del aire y del agua. Bajo la cutícula hay una capa ancha de células de paredes muy gruesas y con punteaduras areoladas (no se aprecian en la imagen) que forman una empalizada de protección. Estas células, denominadas células de Malpighi, son en realidad macroesclereidas. Hay dos capas de macroesclereidas, una orientada perpendicularmente a la superficie del corte y otra más profunda paralela a la superficie del corte. Más internamente se encuentra el tegmen, formado por células de paredes finas y de tipo parenquimático. El tegmen envuelve al endospermo, que está formado por células que contienen inclusiones o granos con material nutricio que servirá al crecimiento del embrión. Estos granos suelen contener almidón y se denominan glútenes.